En las parroquias Sagrado Corazón de Jesús – Iglesia Catedral y San Francisco de Villarrica se celebró con fe y alegría la jornada de oración por los pueblos originarios.
La comunidad de la Catedral realizó la celebración en Ñancul y la de San Francisco en Chaura. En ambos lugares se festejó con una Celebración Eucarística, un fraterno almuerzo, se realizaron rogativas por la tierra y por el pueblo mapuche, en esta actividades se percibió la comunión existente entre los pueblos originarios y la Iglesia.
Recordemos las palabras del papa Francisco en nuestra región, quien señala:
«Küme tünngün ta niemün (La paz esté con ustedes) (Lc 24,36).
Doy gracias a Dios por permitirme visitar esta linda parte de nuestro continente, la Araucanía: Tierra bendecida por el Creador con la fertilidad de inmensos campos verdes, con bosques cuajados de imponentes araucarias —el quinto elogio realizado por Gabriela Mistral a esta tierra chilena—, sus majestuosos volcanes nevados, sus lagos y ríos llenos de vida.
Este paisaje nos eleva a Dios y es fácil ver su mano en cada criatura. Multitud de generaciones de hombres y mujeres han amado y aman este suelo con celosa gratitud. Y quiero detenerme y saludar de manera especial a los miembros del pueblo Mapuche, así como también a los demás pueblos originarios que viven en estas tierras australes: rapanui (Isla de Pascua), aymara, quechua, atacameños, y tantos otros».
