
Hoy, 16 de agosto en un día de especial significado para la comunidad sacerdotal de la Diócesis de Villarrica, se llevó a cabo una excepcional celebración en honor al Santo Cura de Ars, el patrono de los sacerdotes, párrocos y de nuestro Seminario. La jornada comenzó en la casa de ejercicio San Jorge, donde el Padre Ramón Pérez impartió una enriquecedora conferencia titulada «Origen de la Iglesia en La Araucanía y su consolidación». Con sabiduría y profundidad, el Padre Pérez exploró los fundamentos históricos de la fe en la región.
La emotiva celebración continuó en la Catedral de Villarrica, donde se ofició una Santa Misa en honor al Santo Cura de Ars. Monseñor Francisco Javier Stegmeier, en su conmovedora homilía, destacó la humildad del santo y su sacrificio personal en nombre de la fe. «El Cura de Ars nos enseñó la importancia de renunciar a uno mismo y entregarse completamente a Dios», compartió Monseñor Stegmeier, alentando a los presentes a cultivar la gratitud y la gracia divina en sus propias vidas.
La jornada concluyó con un almuerzo comunitario, fortaleciendo los lazos de fraternidad entre los presentes. Los asistentes compartieron reflexiones sobre la figura del Santo Cura de Ars y su impacto en la labor pastoral y la comunidad religiosa en general.
El Rector del Seminario Mayor San Fidel, padre Javier Silva, compartió su gratitud hacia todos los asistentes por su participación en esta conmemoración especial. «Hoy celebramos de manera excepcional la fiesta del Santo Cura de Ars, patrono de los párrocos y los sacerdotes. En San Juan María Vianney encontramos un modelo de sacerdote, humilde, fiel, un hombre de oración y entregado, Que sigue inspirándonos a nosotros, sacerdotes. en su camino espiritual y de entrega al Señor. Este encuentro nos recuerda la importancia de la centralidad en Jesucristo Buen Pastor, afirmó el padre Silva.
En este día de reflexión y devoción, la Diócesis de Villarrica reafirmó su compromiso de continuar sirviendo a su comunidad con fervor y dedicación, guiados por el legado y el ejemplo del Santo Cura de Ars.