Con un almuerzo navideño, finalizó este proyecto dedicado a los adultos mayores de nuestra comuna. Este programa fue posible gracias a la adjudicación de un proyecto de Cuaresma de Fraternidad, con el objetivo apoyar las habilidades cognitivas y motrices de los vecinos más vulnerables de este grupo etario.
La actividad se realizó el martes 19 de diciembre en dependencias del comedor solidario Sagrado Corazón de Jesús, que atiende la parroquia de Catedral y que de manera especial reunió también a los hermanos del comedor de la Parroquia San Francisco.
Con un equipo liderado por Sady Maureria, encargado del área social del Obispado de Villarrica, Eva Carimán, asistente social y en compañía de terapeutas ocupacionales. Todos ellos dedicaron sus esfuerzos en mejorar las habilidades cognitivas de los beneficiados, estado físico, movilidad y redes de apoyo. Para hablarnos del desarrollo de estos meses de encuentro, Ramón nos comparte su testimonio “porque esto nos hizo ser mejores personas, agradezco todo el cariño y el apoyo desde la cocina. Yo estoy muy contento porque he aprendido mucho de las personas mayores y siempre podrán contar conmigo para lo que necesiten”.
La espiritualidad también se desarrolló en estos talleres, aportando al adulto mayor una mayor comprensión de la Palabra del Señor y fortalecimiento de la fe personal en cada uno de ellos. Así lo señala Angelina, quien nos comparte que “ha sido muy buena la visita espiritual que hemos tenido en este lugar. Los voy a echar de menos porque acá conversamos y estoy contenta porque Dios ha estado conmigo en momentos difíciles, rezamos por los compañeros”.
Deseamos para todo este grupo unas felices fiestas de fin de año y esperamos que iniciativas como ésta puedan continuar este 2018 ¡Bendiciones a todos!