«Bendito el que viene en nombre del Señor» (Mt 21, 9)
Este domingo 25 de marzo se inició la Semana Santa con el Domingo de Ramos o de la Pasión, cuya celebración se inició en el frontis del obispado con la bendición de los ramos y culminó en la Iglesia Catedral con la Santa Misa, presidida por nuestro obispo.
A las 10 de la mañana, gran cantidad de fieles se reunieron en el frontis del obispado, donde se realizó la ceremonia de bendición de Ramos. En la cual, monseñor Francisco Javier Stegmeier explicó que la procesión que se emprendería por las calles de la «Ciudad de María» era signo del Señorío de Cristo en nuestra ciudad y en el mundo entero, y el deseo de que Él reine en la sociedad. La procesión se desarrolló por las principales calles de Villarrica hasta la Catedral, con cánticos, lecturas bíblicas y oraciones.
En la Iglesia Catedral se realizó la solemne Misa del Domingo de Ramos, donde Monseñor Stegmeier invitó a todos los fieles a vivir con recogimiento estos días santos, participando activamente de las diversas celebraciones, centrando nuestras vidas en Jesucristo el Señor.